Gil Llorente define la vocación de servicio de la Guardia Civil como su mejor valor social (El Adelantado de Segovia 15-III-2016)

Gil Llorente define la vocación de servicio de la Guardia Civil como su mejor valor social (El Adelantado de Segovia 15-III-2016)

El teniente coronel de la Comandancia de Segovia abre el ciclo de conferencias organizado por la asociación del Cristo de los Gascones.

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  El teniente coronel Fernando Gil Llorente (d.), durante su charla. / Juan Martín
 

La iglesia de los Santos Justo y Pastor acoge, un año más, el ciclo de conferencias que organiza la asociación cultural del Cristo de los Gascones, previo a la Semana Santa. En esta edición, la XXVIII, el teniente coronel de la Comandancia de Segovia, Fernando Gil Llorente, fue el elegido para abrir ayer el ciclo y lo hizo con la ponencia ‘La Guardia Civil: creación y despliegue en Segovia. Desde 1844 hasta nuestros días’, porque, dijo, “de lo único que puedo hablar con propiedad, y no con mucha, es de la Guardia Civil”.
Gil Llorente comenzó relatando los antecedentes del Cuerpo, sus orígenes y la necesidad que había en el país de contar con un cuerpo de seguridad de sus características. “En 1844 veníamos de una guerra, había un bandolerismo exagerado, mucha gente en los campos sin hacer nada, inseguridad en los transportes… y había que crear un cuerpo de seguridad que no estuviera bajo el mando político, porque eso, al final, es moneda de cambio de otras cosas”, explicó. Y así nació la Guardia Civil, que “es guardia armada bajo el gobierno de la autoridad civil y eso hace gracia a la reina Isabel II, entonces con trece añitos —contó como anécdota para explicar el origen del nombre—. Así se compaginan las dos cosas, el mando militar y el servicio eminente de cara al ciudadano”.
“A partir de ese momento, con muchas cortapisas, empieza a andar y tiene éxito muy pronto, aunque a veces el poder político no lo entendía; pero tuvimos la suerte de que en los periodos progresistas, liberales e incluso moderados, hubo unos directores y unos ministros de la Gobernación o de la Guerra que valoraban el cuerpo y lo defendieron”, continuó.
Y así, poco a poco, se fue desplegando por todo el país, “en sitios prestados, amortizados, en conventos en desuso…”, apuntó, hasta llegar a la actualidad. Y hoy en día, dijo, “la Guardia Civil es una institución vertebradora del Estado, con despliegue en todo el territorio nacional; tenemos también una variedad de cometidos tremenda, somos policía integral en todas las ciudades de España, tenemos una variedad de especialidades que nos hace multifuncional, tenemos una proyección internacional consolidada desde la época de las colonias y que mantenemos ahora y tenemos un prestigio muy bueno”.
Aunque eso hay que mantenerlo día a día, reconoció, “con una labor de cercanía, de profesionalidad, de tender una mano para que te conozca la gente… porque es fácil perder todo conseguido con un mal gesto, así que el trabajo tiene que ser constante”.
“En Segovia nos sentimos absolutamente integrados con la población”, aseguró Gil Llorente, para quien “una institución es más válida cuanto más cercana y más valiosa para el ciudadano es. El ciudadano se tiene que sentir confortado con la presencia de la Guardia Civil y no castigado. El Cuerpo tiene que adaptarse a los nuevos tiempos, las nuevas tecnologías, las nuevas tendencias y modas, las nuevas definiciones territoriales… por supuesto, pero sobre todo tiene que haber una vocación de servicio, la Guardia Civil no es un puesto de trabajo, es una vocación”, concluyó el teniente coronel.

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